jueves, 27 de mayo de 2010

Aquí, allá, en ningún lugar.


A veces me pregunto cuán cerca estoy de cada una de las fotos, cuánto tengo y cuánto me falta, si puedo considerarme dichoso o desfavorecido...

Y además, si tengo, ¿qué hago con todo lo que tengo? ¿Es mío porque yo lo conseguí? ¿Puedo compartirlo? ¿Merecen otros mi crédito sin haber realizado el esfuerzo que considero necesario?


Y si no tengo, ¿alguno de los que tiene, debería compartir conmigo? ¿O sólo podría, sin ninguna obligación? ¿No ven que lo necesito, y que no tengo los medios para lograrlo? Y si tengo los medios, ¿estoy dispuesto a esperar el tiempo que los medios demoren en darme lo que necesito?



Tengo 24 años, y un cofre con un pergamino de sueños que apenas me deja cerrar la tapa. Cada uno que cumplo, agrego varios más. Sé que tengo poquito, pero quizás, en una de esas, ese poquito me alcance para ser feliz y ya no necesite más nada.

miércoles, 12 de mayo de 2010

El fin de una etapa

No sé si coincidirá con el fin del mundo que predijeron los mayas. No sé si mañana me levanto torcido, mando todo a la RPM y san se acabó.

Pero en mi interior sé que la etapa ya se terminó. Puede que la estire, que con argumentos que yo mismo sé que voy a creerme me convenza de que todavía queda un poco de vino en la botella. Tarde o temprano te das cuenta que el tiempo que invertiste en convencerte de que algo no estaba pasando, es tiempo que pudiste haber aprovechado para remediar eso que sí estaba pasando.

Hay cosas que no me gustan. Y cuando las cosas no me gustan, puedo poner cara de poker y decir "está todo bien", pero la revolución interna va creciendo. Y tengo miedo que se me escape por la boca, entonces hago fuerza para mantenerla cerrada. Mas, como dicen varios físicos, "a igual cantidad de energía potencial y cinética, el movimiento hace parecer la existencia de abundancia".

La procesión va por dentro.

domingo, 2 de mayo de 2010

No aguanto más.

¿Qué pasa cuando sobre un globo inflado uno pone un dedo y ejerce una presión por más mínima que esta resulte? El globo se deforma, y crece hacia el lado libre, donde no sufre presiones.

Mas, ¿qué pasa cuando son infinitos los dedos sobre el globo, y quedan muy pocos espacios libres? La superficie del globo se tensiona.

Y, peor aún, cuando las presiones se ejercen reiterada y profundamente, el globo cede, y libera su interior, al libre albeldrío, pretendiendo despojarse de responsabilidad alguna.

Puedo asegurarles que no a todos les gusta cuando eso sucede.