sábado, 28 de marzo de 2009

El domingo: ¿Shopping o fútbol?


Siempre nos ha pasado con nuestras parejas, novias, esposas, amantes, etc, pelear por el dominio del control remoto, o las actividades a realizar el fin de semana, o los "amiguitos/as" que tenemos.

¿Es ésta una cuestión común? Según mi criterio, cuando uno vive solo es su propio dueño y forja su destino. Cuando la cosa va de a dos, todo cambia repentinamente. Ocurre que tanto el hombre como la mujer intentan imponer su liderazgo, ese que tenían hasta un ratito antes de estar juntos.

El problema surge cuando uno de los dos entiende que no es capaz de superar al otro y se repliega, otorgándole así el título de vencedor. Y digo que hay un problema porque quien se reprime no es feliz, no disfruta redimiéndose, pero pone en la balanza su amor hacia la otra persona y no cabe duda para dónde se inclinará.

Y aquí el problema es otro. Cuando uno se "acostumbra" al otro. Sabe que su pareja hará tal o cual cosa primero, luego tal otra, y lo que es más, sabe incluso que intentará enmendar las cosas, y hasta sabe de la manera que lo intentará, y como cederá ante eso que la/lo conmovió cuando se conocieron, y que valora del otro por encima de todas las cosas.

Hay asuntos que a mi entender tendrían que conversarse mucho antes de estar en pareja. Porque a fin de cuentas, estar en pareja es una sociedad, un contrato. Y siendo un contrato un acuerdo entre partes, el monopolio aparece muy distante de este concepto.

-Yo el domingo quiero ver el partido con mis amigos, ¿te preparás algo para comer, una picadita?
-Yo quiero ir de shopping con las chicas y tenés que acompañarme.
No señora, entiéndalo. Él no quiere ir a hacer shopping, quiere ver el partido
No señor, entiéndala. Ella no sabe un pomo de fútbol, y no se va a quedar a cocinar para sus amigotes.

Estar en pareja es algo de a 2. Pero no siempre 1 y 1 suman 2...

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