lunes, 8 de junio de 2009

Fe.

Anoche, después de mucho tiempo, cumpliste una promesa. Ojo, no estoy diciendo que nunca hayas cumplido una, sino que hiciste varias, durante mucho tiempo, y eran como vacías, porque incluso antes de prometer sabías que no ibas a cumplir.

Por eso creo que significó más para vos que para mi.

Estuvo bueno despertarme para atender el teléfono, escucharte, y reirme mientras me hablabas.

Te tengo fe.

No hay comentarios:

Publicar un comentario